Cuentan los Abuelos

Foto: IRVING PENN
Cuzco 1950

La Aparición del Hombre Wanka

El hacedor del mundo, Con Ticsi Viracocha, creó la tierra y los seres que la poblaron. Hizo brotar un manantial en Huari de donde salió la pareja Huanca: Atay Imapuramcapia, el varón; y Uruchumpi, la mujer. Ellos fueron a ese lugar el primer pueblo. Sus hijos empezaron a poblar otras comarcas. Pero sus descendientes, dicen, con el tiempo, ingratos, se olvidaron de su creador y adoraron al dios Huallallo Carhuancho.

El Apu y la Fiesta de las  Cruces

Este es un ser presente en todos los pueblos del mundo andino. En las teorias antropologicas, la adoracion al monte mas cercano es uno de los tópicos mas encontrados. Casi todas las sociedades, desde que el hombre ha decidido dejar el nomadismo y se ha sedentarizado, se han establecido en las laderas de las montañas o cerca de los lagos y rios. Para el Hombre Andino, el APU es el anciano fundador del mundo, que da reparo, que se eleva hacia el Hanan Pacha . Allí, en la altura vive el Apu, ser espiritual fundamental que los españoles remplazaron y sincretizaron con la cruz cristiana en el vertice de cada "cerro".

Este es el origen de la Fiesta de las Cruces, en el mes de Mayo, en la que cada pueblo trae de las alturas la CRUZ hacia la iglesia principal para la adoración.

Foto: IRVING PENN
Cuzco 1950

Tapado, chacho  y los Gentiles

Muchos de los tesoros que partieron hacia Cajamarca durante la prisión de Atahualpa no llegaron a su destino. Se conoce esta voz que viene de los andes peruanos  refiriendose a tesoros de dicho rescate u otros tesoros sepultados durante la conquista. Al rededor de estos tesoros se ha construido una serie de mitos y leyendas que hablan de condenados, de maldiciones para los ambiciosos y de gente que ha encontrado dichos "tapados" voviendose ricos de la noche a la mañana. Un efecto particular en la salud de quienes veridicamente han descubierto algun enterramiento de metales, sean estos preciosos o no es lo que en las serranias llamamos "CHACHO" . No es mas que el efecto de los gases que se forman bajo tierra como producto de la oxidación de dichos metales. En especial, el antimonio es un gas letal que puede producir la muerte en caso de inhalación continua. Esta creencia de la venganza del muerto aflora como defensiva, de respeto a los "gentiles". Probablemente el respeto a los antepasados puede mas que la ambición para el poblador andino, quien no ha abandonadosus creencias no obstante las niege ante los extraños. Las tumbas precolombinas, poblados antiguos hoy han dejado de ser venerados, pero se supone que una fuerza sobrenatural las custodia castigando a los profanos.

El efecto del "chacho" es variable para los pobladores andinos, pasando de un leve sangrado de las fosas nasales a extrañas enfermedades estomacales, pulmonares y hasta la muerte. Existen tambien actos de sanación con presencia de ofrendas de frutas, alcohólicos, coca y animales.

Gentil Hualash (narración)

Los gentiles viven en la cumbre de los cerros. Son los huesos de los primeros indios. Cuando hay fiesta en la quebrada  las jarachupas y los añases les avisan para que bajen un rato a alegrarse. La trilla de Marcavalle es fiesta bien alegre, una vez que terminan de segar los campos preparan las parvas y luego las eras. Extienden  un montón de espigas sobre el suelo y luego todos bailan sobre ellas para que desgaje el grano. Las huamblas al atarder entonan  huaylas junto a las eras. Los huaylas son cantos y las muchachas los dicen con voz muy aguda  para que se oiga valle abajo, valle arriba, por toda la quebrada. Por ese tiempo un gentil bajó a las eras. Vestía poncho de vicuña, bufanda de estambre y sombrero con al muy caída . Era alto y fino el gentil. Cuando llegó a la fiesta bailaban los mozos hualash  zapateando sobre las eras con acompasada energía. El gentil tambien se puso a bailar. Al amanecer una jarachupa le jaló el poncho avisandole la hora, entonces el gentil escapó sin ser advertido.

Subió ligero por el camino del monte . En el silencio del alba se sentian crujir sus huesitos viejos. A la noche sigueite bajó otra vez a la misma era. Vestía otro poncho y un sombrero de lana blanca muy lindo. Se había embozado en su bufanda y el sombrero le hacía sombra en la cara . Nadie sabía que era gentil. Como en vez anterior bailó muy entusiasta. Bien a la noche la jarachupa le jaló el poncho. Como era él quien mejor bailaba las muchachas le pidieron que no se fuera. Lo rodearon bailando y cantando.

El gentil les dijo: "gentil tullo shallallan, que quiere decir , no oyen como sonajean mis huesos de gentil, no oyen como crujen? Pero nadie le dejó partir y lo retuveron hasta que salió el sol. Entonces el lindo poncho se cayó , se hundió el sombrero blanco y rodópor el suelo con un montón de huesos viejos.

Foto: IRVING PENN
Cuzco 1950

 

Pishtaco

Este es uno de los personajes de mayor presencia en la narrativa oral andina. Se trata de un personaje prefigurado con presencia en las altas cordilleras, parajes desolados, lagunas y quebradas de los Andes. Tiene como caracteristica primordial su gran medida corporea y su aspecto de hombre blanco , barbudo

y rubio o pelirrojo. Algunos han observado la similitud de este personaje con los antiguos conquistadores, Mistis o hijos de los terrieros españoles o mestizos blancos que teniendo fama de sanguinarios, inmorales y de lengua no reconocible por los quechuas, hacían de este un personaje diabólico e invencible como los ichillocllo o gnomos barbados, rubios lujuriosos que pueblan puquios y manantiales.

El "Nacaj" o Pishtaco no es un simple asesino. En su raíz mítica no mata por dinero ni por diversión, sinó por mandato de superiores con el fin de obtener una dotación de grasa humana. Segun versiones recientes recogidas en el Cuzco por F. Kauffmann (1974) esta grasa humana sería indispensable para el funcionamiento de maquinaria fina emplazada en Lima y para mezclarla con la gasolina para hacer volar a los aviones.

El pishtaco pudo ser en tiempos pre-colombinos un comisionado oficial del sacerdocio, proveedor de material para los sacrificios.

La muerte del Pishtaco (narración)

Cerca de la cueva de un Pishtaco, un anciano instaló su choza. Allí llegaba por las tardes a dormir, acompañado de un perro cuyo nombre era Jarimán. Al Pishtaco no le gustó la vecindad del anciano y ante el temor de ser descubierto, resolvió quitarle la vida. Una noche oscura se dirigió a la choza del anciano a quien encontró masticando coca.

- viejo, la plata o la vida!!

el anciano replicó:

- notengo dinero , ¿de dónde te voy a dar nada?

- entonces pagame con la vida - concluyó el Pishtaco listo a degollarlo.

Pero el anciano imploró una gracia diciendo:

- antes de que tu me hagas nada te pido un momentito para rogar a Dios  y despedirme de mi perro cantando mi tristeza.

-Bueno! pero rápido! - fue la respuesta del Pishtaco.

En efecto, el anciano se puso a cantar llorando y rogó a Dios por la buena vida de su perro con estas palabras:

- Hay Jarimán , Jarimán! Hallegado la hora de mi muerte , el fin de mi destino, me voy de esta vida , hay Jarimancito!!!

El Perro que estaba por allí cerca, al escuchar las voces de su dueño vino disimuladamente corriendo, por detrás del Pishtaco de un salto lo cogió por la garganta y lo derribó al suelo. En ese momento el anciano cogió el puñal y lo plantó en el corazón del Pishtaco , quien murió en el acto.

El anciano enterró el cadaver en lachoza y fue a la cueva del Pishtaco donde encontró oro y plata en gran cantidad. Volvio rica la ciudad y en el resto de su vida cuido bastante a su querido Jarimán que le había salvado de una muerte segura.

Foto: IRVING PENN
Cuzco 1950


Jarjaria

 El "jarjaria " es el hijo mal concebido entre dos hermanos de la misma madre. Dicen nuestros abuelos que recorre los lugares sombríos, las laderas de la cordillera en busca de víctimas. De naturaleza carnívora y gran inteligencia, este ser legendario aprovecha de la inocencia de los niños y los ancianos para comerselos.

Foto: IRVING PENN
Cuzco 1950
Historias del Valle del Mantaro